miércoles, 13 de marzo de 2019

CAPÍTULO 119: TODO MENTIRA

Después de desahogarme de lo lindo, voy a mi sitio. Sé que es la última vez. Desde allí, veo a mis sobrinos jugar con Vero y con Carlota. Sonrío casi sin tener ganas pero, a la vez, aliviado de verles entretenidos y riéndose.

Entonces la veo llegar. Se abraza a Vero y a Carlota. Veo como Lucía se queda paralizada, y Paco también. Desde allí, veo como Malú se agacha y abre sus brazos. Lucía se lanza hacia ella y la levanta en peso. No puedo evitar sonreír al ver esa imagen. Con Paco hace lo mismo, aunque le cuesta más levantarle en peso. Está mayor, crecen muy deprisa. Vero señala hacia mí y bajo la cabeza. Supongo que Malú ha preguntado por mí. No, no me hagas esto. No vengas a buscarme. No me hagas decirte las cosas que no quiero.

-Hola Hugo… - siento su voz y su mano en mi hombro a mi espalda. No puedo evitar suspirar levemente –

-Hola – respondo de forma seca –

-Tus sobrinos son un amor… - dice de forma dulce –

Cierro los ojos y vuelvo a sentir rabia. No quiero sentir esto. No quiero. Paso por su lado y bajo por las escaleras para alejarme de ella, pero noto como me persigue. Me persigue hasta un rincón, donde no tengo escapatoria.

-Hugo! – exclama haciéndome que pare – para… - agarra mi brazo pero lo aparto – yo… - baja la cabeza – siento lo del otro día… no… no sabía que… - balbucea –

-Sabes una cosa? – la miro y me mira con gesto culpable – siempre me has disparado antes de preguntarme – baja la cabeza un segundo y vuelve a mirarme – desde que te conozco… - digo hasta con tono de rabia – algunas balas las he esquivado… - sigo con la metáfora – pero la del otro día me dio aquí – me señalo el pecho – y estoy harto de que me dispares y luego preguntes…

-Hugo…

-No – le corto – no pienses que va a cambiar algo el que seas amable o simpática con mis sobrinos… - me mira y va a hablar pero se lo impido – y me la suda completamente no haberte dicho que los traía…

-Pero si no me importa, de verdad… lo comprendo y…. - dice intentando mantener un tono sosegado –

-Me la sudaría si te importase… - digo con rabia – sabes por qué? -  me mira temerosa – porque mientras yo la semana pasada me quedé aquí para no dejarte tirada, esos niños vieron a su padre inconsciente, lleno de sangre, metidos en un coche del que no podían salir… - digo de forma gráfica, viendo como traga saliva de la impresión – mientras tú me disparabas de nuevo, esos críos lloraban porque no les dejaban ver a sus padres… - me mira con gesto como si fuera a echarse a llorar de un momento a otro – me quedé aquí, a pesar de todo lo que me has hecho – digo alzando la voz – anteponiendo esta mierda – señalo hacia el escenario – a mi familia… - aprieto la mandíbula – por no dejarte tirada… - baja la cabeza y noto como intenta no llorar – este es el último concierto Malú – digo seguro y me mira intentando hablar – el último en el que me ves a tu derecha, controlando que todo salga bien para que te luzcas… - digo con rabia – el último en el que aguanto que, cuando algo sale mal, me eches la culpa, y, cuando algo sale bien, no sea gracias a mí… - me acerco un poco a ella – y todo por qué? – alzo de nuevo la voz – porque te jode que me haya tirado a otra? – niego con la cabeza con gesto de desprecio – si tanto te jode, es que quizá zanjaste algo que no tenías que haber zanjado… - me mira con los ojos rojos – y sabes qué? – digo con indiferencia – me importa una mierda… porque es muy tarde… - digo seguro – porque estoy harto de ser el puto pringado al que todo el mundo le hace daño… - me mira con gesto culpable – estoy harto de ti… - digo lleno de rabia – y te digo una cosa – digo dispuesto a irme tras esa frase – si voy a buscar a alguien para que me sustituya, no va a ser para no putearte a ti… - me mira – sino para no putear al pedazo de equipo que tienes y que no te mereces… - digo apretando de nuevo la mandíbula – no te mereces tener gente tan buena a tu lado… - camino hacia un lado – te lo vuelvo a repetir… - baja la cabeza – eres la persona más injusta que he conocido en mi puta vida… - al ver su cara, sé que me estoy pasando muchísimo, pero se acabó, no puedo más – has conseguido lo que querías en esa carta… - me mira a punto de llorar – has conseguido que te odie… - digo arrepintiéndome al instante –

Sin más, sin decir nada más, arrepintiéndome de cada palabra que he dicho, desaparezco de su lado. Camino sintiendo que las piernas van a fallarme de un momento a otro. Imaginándome cómo tiene que haberse quedado, cómo tiene que estar llorando supongo, por el gesto que tenía con la última frase. Me he pasado mucho, lo sé… he dicho tantas cosas que no siento… pero así tiene que ser. No puedo estar con alguien así. No es la persona que conocí. Aquello que pasó en Algeciras… no va a volver… y yo tengo que largarme de aquí cuanto antes. 

1 comentario:

  1. Maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaassssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss porfaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

    ResponderEliminar